viernes, 2 de mayo de 2014

[Enfrentamiento de Esencia] Capítulo II

Bueno amigos, aquí esta la segunda entrega, espero sea de su agrado

Capítulo 2 Celebración.-

Al rescindir el sonido de las trompetas se guardó absoluto silencio mientras los representantes de Efenia y Lunari junto con Piedad la archí maga de la esencia solar se dirigían al centro de la plaza ceremonial de Anhazar, de entre las cuatro distinguidas personalidades, se separó un poco Cir Arminus gobernante del Reino del Sur para dirigirse a todos los presentes.

Imagen tomada de aquí


Hermanos todos, tengo el enorme privilegio de dirigirme a vosotros en este día de celebración, este es un día de alegría y regocijo, estamos aquí reunidos humanos y tremons como los hermanos que somos, estamos aquí para recordar el inicio de la nueva era de prosperidad y paz que conllevo el final de la “Guerra de la Sangre”, este día marca un hito pues cada año nos reuniremos en esta misma fecha para adorar a los dioses, para no olvidar nunca el terror y la destrucción que conlleva un enfrentamiento armado entre hermanos, os invito a todos a alabar a los dioses, a regocijaros, a disfrutar de las festividades pues motivos sobran, no quiero cansaros más solo me resta deciros bienvenidos, diciendo estas pocas palabras Cir Arminus dio por iniciada la primera Fiesta del Re-Nacimiento que se celebraba en toda la historia de Ebyam con la esperanza de que no sea la última.

Inmediatamente terminado el corto discurso de Cir Arminus se inició la celebración, sendas representaciones de Efenia y Lunari se hicieron presentes, primero los hijos de la Luna Plateada, rindieron tributo a los dioses con una danza que recordaba la re-creación de los tremon, la nueva alianza humano-tremon que se había realizado, la danza expresaba la fuerte unión que se había formado en tan corto tiempo entre estas dos razas que predominaban sobre Ebyam, muchos de los presentes derramaron lágrimas mientras observaban tan fino espectáculo, todos recordaban y sentían el lazo inquebrantable que se había formado entre todos los habitantes de Ebyam, finalizada la danza, muchos tremons se acercaron a la plaza central llevando ofrendas florales y de artefactos delicadamente construidos como presentes a los dioses en gratitud a la bondad de estos, agradeciendo todas las bendiciones recibidas.

Terminada la ofrenda tremon llegó el turno de la delegación humana, estos también dedicaron a los dioses y a todos los presentes una obra de teatro recreando el orden natural de las cosas, la manera en la que todos los seres vivos de Ebyam vivían en total armonía, una paz resultado del conocimiento de lo malo y no de su ignorancia, paz por la cual valía la pena vivir, era un obra profunda que llenaba de paz el alma de los presentes, todos se sentían uno con la naturaleza, uno como siempre habían sido, uno como siempre serían, el espectáculo humano también llegó a su fin para dar paso de manera similar a la anterior a las ofrendas del pueblo.

Estaba entrada la tarde para cuando terminaron las ofrendas, llegaba el momento del acto principal la ofrenda de los lideres a los dioses, se realizaría una ofrenda de sangre, recordando que la sangre de humanos y tremons era la mismísima esencia de sus creadores.

Primero Cir Arminus junto a Neyra Divath, se acercaron al atrio de Haznarepse, llenaron la candelilla hueca con sangre que emanaba de ambos, una vez esta se encontraba llena procedieron a encenderla con fuego blanco resultante de su acción conjunta.

Encendido el altar de Cristal, llego el turno de Drager, este se acerco al altar de Añimu, y realizándose un corte en la mano derecha vertió su sangre en la hendidura del altar de plata mística, una vez que este se encontraba lleno, procedió a encenderlo con un extraño aparato que saco de su malla, aparato que escupía fuego

Se encontraban encendidos los altares secundarios, llegaba el momento cúspide de la celebración, el momento en el cual se debía encender el altar solar, se hizo un solemne silencio, no se escuchaba nada, solo el delicado caminar de Piedad rompía la afonía reinante, en un breve lapso de tiempo, instantes en el cual todos los presentes parecían guardar el aliento, Piedad se acercó al altar negro, ahí primero elevo una corta plegaría en silencio a Us’ Aretama, terminada la plegaria, se realizo una incisión junto a su pulsera verde, la sangre tibia y carmesí empezó a verterse en la hendidura del altar, una vez se llenó el recipiente con la sabia de la archí maga, nuevamente elevó una segunda plegaria, una oración desconocida para todos, solo ella y el sol púrpura la conocían, esta oración fue más larga que la anterior, finalizada este recogimiento Piedad procedió a encender el altar solar con fuego blanco que emanaba de sus delicadas manos, con esta acción terminaban las ofrendas de los habitantes de Ebyam a sus dioses, ofrendas que culminaban el instante en el cual el sol abandonaba la bóveda celeste para permitir que la luna se enseñoree sobre todas las criaturas, en ese relevo celestial, por un breve instante se pudo observar a los dos astros, ambos brillaban en toda su intensidad aprobando y recibiendo con sumo agrado el sacrificio de sus bien amados.

Entró la noche todo el ambiente se llenó algarabía, el sonido de alegres melodías inundaba toda Anhazar, las mesas empezaron a llenarse de alimentos, todos los presentes compartirían los abundantes comestibles con los cuales habían sido bendecidos, unos tantos comían y bebían otros decidieron danzar era una ocasión de suma alegría, los corazones estaban hinchados de júbilo, la fraternidad se respiraba en el aire, desde los cielos los dioses observaban atentamente a sus hijos y se felicitaban a si mismo, al fin la paz reinaba, sus hijos eran hermanos en la simplicidad.

En la mesa principal se encontraban reunidos Cir Arminus, Neyra Divath, Drager, Piedad, Rotreb y Steuma, todos convidaban de los majares con los cuales estaba llena la misma, todos bromeaban y llevaban un amena conversación, todos jugaban chanzas a Cir Arminus y su nueva vida de casado, al mismo tiempo burlonamente cuestionaban la inquebrantable soltería de Drager, al igual que el gran compañerismo entre Rotreb y Steuma, la conversación era muy despreocupada, solo Piedad parecía un poco incomoda pues aunque compartía e incluso celebraba las bromas claramente se notaba que estaba ausente, se encontraba algo meditabunda, entonces en una acción inesperada Drager decidió sacar a bailar a Piedad, esta no tuvo tiempo a negarse, en menos de lo que ella mismo esperaba se encontraba en el centro de la pista de baile, los siguieron Cir Arminus y Neyra Divath.

Mientras bailaban Drager decidido a sacar a Piedad de sus cavilaciones la llenaba de halagos y preguntas con poco sentido, nada parecía resultar, conforme Drager hablaba, ella se alejaba más en sus pensamientos y recuerdos, nuevamente Drager realizó una acción inesperada, en esta ocasión pregunto, Y RA-Del, que es de él, ha mejorado en su estado de salud, al momento de escuchar el nombre RA-Del, Piedad regresó de su viaje mental y bajó el rostro, parecía querer ocultar algo, mientras desviaba la mirada respondió, no todavía no sale de su inconsciencia, he tratado por todos los medios de ayudarlo, pero nada sirve, he elevado plegarias al sol y no consigo nada, busco repuestas y la única que recibo es que debo esperar, que él despertara cuando sea el momento, Drager tratando de aliviar el dolor de Piedad pero sin minimizarlo, dijo, hermosa Piedad, considero que el mismo RA-Del debe luchar para regresar del lugar en el cual se encuentre, estoy tan seguro de este hecho, como estoy seguro que desearía que vos disfrutéis la fiesta, es una ocasión para la alegría, para agradecer a los dioses incluso por los favores que aún no recibís, debéis subir los ánimos, demostraros a vos misma la inmensa confianza que tenéis en el Sol Púrpura, sois su bien amada, él mismo concederá sus bondades en el momento propicio, por ahora solo podemos esperar y confiar, estas palabras dichas con tanta pasión y convicción calaron hondo en el alma de Piedad, de este modo ella cambió su actitud y se permitió a si misma el disfrutar la fiesta y la compañía del galante Drager.


Terminada la danza todos regresaron a sus lugares, ahí reiniciaron sus conversaciones pero en esta ocasión fue una conversación mas seria, no existían sonrisas, el tema de RA-Del había salido a flote, todos coincidían que era sumamente triste la condición de este, desde el fin de la “Guerra de la Sangre” no había podido recuperarse, físicamente estaba casi curado, su cuerpo estaba recompuesto gracias a los cuidados y al esmero de Piedad, pero su conciencia no regresaba, parecía un muerto, lo único que lo distinguía de estos radicaba en el hecho de que tenía pulso y respiraba, por lo demás era un autentico cadáver, mientras todos vertían sus opiniones sobre la situación, habían dos que se alejaron en sus pensamientos, Piedad se sumía nuevamente en su interior, elevaba sus plegarias a los dioses, rogaba por la recuperación de RA-Del, por su parte Drager se retrajo, empezó a sentir culpa, su mente volvió al pasado, regresó un año atrás, recordó su anterior vida, retrocedió mentalmente al día en el cual todo terminó, o mas bien todo inició para fortuna del mundo y la suya misma.

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