Rojo y Blanco, Capítulo XXIII

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Capítulo 23 “Piedad”


Los paladines comunicaron a todos acerca de la nueva amenaza que se acercaba a ellos, expusieron la necesidad de iniciar un nuevo ciclo de entrenamiento mágico, esta propuesta fue aceptada inmediatamente, nadie se opuso, con la próxima salida del Sol Rojo empezaría el nuevo adiestramiento de los magos.

Una vez terminada el concilio los paladines se retiraron a caminar por el jardín real, mientras lo hacían encontraron a Rotreb y Steuma que en companía de una mujer elevaban una plegaría a los soles, inquietados por el particular se acercaron con la finalidad de averiguar por quien elevaban sus oraciones, al llegar al sitio donde se encontraban los magos, se percataron que se encontraban en un claro no muy extenso situado en mitad del jardín rodeado de un sin número de arbustos, árboles y flores de variados colores y fragancias que al fundirse en ese lugar en particular producían un efecto que aliviaba el espíritu, se respiraba paz, pero lo que mas llamaba la atención era un sin número de girasoles que alegraban la vista, era la flor predominante del claro, al llegar a la presencia de los magos Cir Arminus preguntó el nombre de la persona por la cual oraban, sin cambiar la actitud de respeto hacia el fallecido Steuma respondió, que la persona que había ido a la presencia de los soles era Havyd el mago rojo, Cir Arminos al igual que Neyra Divath sintió un dolor en el alma pues había pasado por alto la desaparición de Havyd, cambió su semblante y también inició sus plegarias, al terminar se aprestaban todos a retirarse con una gran pena en sus corazones, entonces la mujer que hasta el momento permanecía en el mas absoluto mutismo, se decidió a hablar.

Mis altezas, os ruego no sintáis dolor en sus almas, el hombre por el cual hemos orado, no merece que lamentemos su partida, en primer lugar me regaló la vida, entregó la suya a cambio de la mía y mientras iniciaba su viaje al mas allá pude ver como su rostro se iluminaba, se encontraba feliz, además sin haberlo conocido podría asegurar que tuvo una vida plena y al final de ella debió haber alcanzado todas sus metas, considero que debemos guardarlo con alegría en nuestros recuerdos, estas palabras fueron pronunciadas con tanta pasión y seguridad por esa mujer, que todos quedaron atónitos, entonces Rotreb cogió la palabra, lo que dice esta hermosa dama es la verdad cuando llegamos a palacio la encontramos junto al cuerpo frío de Havyd, aunque nadie lo pueda creer en su rostro estaba cincelada una sonrisa casi imposible para un muerto en batalla.

Con algo de duda Cir Arminus se dirigió a la mujer, podríamos conocer el nombre de tan maravillosa mujer, preguntó, entonces pareció que todo el mundo guardó silencio, no se escuchaba nada, ni siquiera el sonido del viento, era como si todos los seres que existían en Ebyam estuviesen esperando con ansia y suma reverencia escuchar el nombre de aquella mujer, y ante la expectativa de todos lo presentes, con una melodiosa voz semejante al canto de los pájaros, tan pacifica como el sonido de un manantial, hermosa como la más sublime creación, de los labios de aquella mujer brotó como una flor una palabra sencilla pero a la vez cargada de poder “PIEDAD”.

Piedad, todos los presentes repitieron esta palabra, parecían saborearla, llegó el turno de hablar para Neyra Divath, podríamos conocer algo de vos mi estimada lady Piedad, pues no recuerdo haberla visto en ningún de los entrenamientos que hemos realizado hasta el momento, nuevamente habló Piedad, diciendo, no necesitáis decirme lady su alteza, Piedad esta bien, y si no me habéis visto en ningún entrenamiento es por la sencilla razón de que no he asistido, no se si lo habéis notado pero no poseo ningún tipo de magia, motivo por el cual soy de mas ayuda realizando mis labores cotidianas que consisten en el cuidado de los jardines del palacio, esta noticia dejó a todos muy sorprendidos, Rotreb y Steuma no lo podían creer nunca habían conocido a un ser humano sin magia, en cambio los paladines se cruzaron una mirada cómplice al oír las palabras de Piedad, habló Neyra Divath, Piedad nos darías el placer de acompañarnos a cenar en palacio sería un autentico privilegio poder conoceros más, Cir Arminus se limitó a asentir con inmensa galantes, ante tan convincente invitación Piedad no pudo mas que aceptar la propuesta de los paladines, así todos partieron tumbo al interior del Palacio de Cristal.

Entrada la noche los paladines se dispusieron a cenar en companía de Piedad, la cena era muy agradable, tanto de los paladines como su invitada eran muy buenos para conversar, todos tuvieron la oportunidad de conocerse un poco mas, aunque sin lugar a dudas la persona que fue el centro de la conversación, era Piedad, lo paladines pudieron conocer que era originaría del Reino del Este, que vivió ahí hasta que decidió buscar su destino pues en aquel lugar no se encontraba a gusto a causa de no poseer magia, razón por la cual abandonó su hogar y se dirigió al Reino del Sur, al llegar ahí el padre de Neyra Divath era quien gobernaba él fue quien le dio la tarea de cuidar el jardín real, ocupación que la llenó enormemente, desde ese entonces hasta la fecha era quien se encargaba de cuidar el jardín como si se tratase de su posesión mas valiosa.

Una vez terminada la cena, Piedad se disponía a despedirse de sus anfitriones, en ese momento Neyra Divath le pidió que se quedase a vivir en el castillo al menos por un tiempo, deseba conocerla más, le había causado muy buena impresión, además tenía algo especial y deseaba saber que era, Cir Arminus se unió a la petición y ante tanta insistencia, nuevamente tuvo que ceder a la solicitud de los paladines, así se despidió y fue guiada a sus habitaciones.

Una vez que Piedad, se retiró del salón de banquetes hacía su nueva habitación, los paladines iniciaron una nueva plática, la primera en hablar fue el “Paladín Blanco”, lo sentiste verdad, como un ser humano puede estar lleno de las dos esencias de los soles, se supone que eso es imposible, nadie es bendecido por los dos soles a la vez, pero ahora que lo he sentido no lo entiendo, como sucedió, que tipo de mujer es Piedad, debería ser la criatura más poderosa de Ebyam y sin embargo ni siquiera puede utilizar la magia mas simple, es como si no tuviese ningún tipo de esencia en su cuerpo, en realidad es un enigma, Cir Arminus respondió, no lo sé, no sé que tipo de mujer es Piedad, pero te puedo asegurar que el haberla conocido esta en el sabio plan de los soles, ella debe ser una parte fundamental en la estrategia que debemos seguir en la nueva batalla que se nos avecina, conocemos el poder de la magia conjunta, de alguna manera debemos despertar el poder interno que lleva nos resultaría de gran ayuda pues no necesitaría lacerar su cuerpo para fundir las dos magias, con la bendición de los soles en esta ocasión erradicaremos de una vez las hordas tremons, venceremos definitivamente a Drager, retomó la palabra Neyra Divath, tienes razón querido, debemos confiar en los soles, no nos desampararán y si la Luna Negra a otorgado nuevas fuerzas a sus oscuras criaturas, nuestros padres no nos desampararán y si Piedad es la nueva portadora de la esperanza para la humanidad estamos en la obligación de ayudarla a explotar todo su potencial, yo misma iniciaré su entrenamiento mañana, espero que no se resista mucho a la idea de aprender magia, me parece que le duele el hecho de nunca haber podido realizar ningún tipo de conjuro, y tú sabes lo difícil que es luchar con fantasmas de pasado a ti mismo te tocó luchar con los míos, espero que ella a diferencia mía este dispuesta a dejarse ayudar, con una sonrisa respondió Cir Arminus, mi amada reina debes tomar en cuenta que luchamos juntos, si la victoria se ha conseguido no solo sobre la Luna Negras sino principalmente sobre tus temores y miedos es gracias al trabajo conjunto, a pesar de lo que pienses nunca me abandonaste en ninguna de mis empresas, estuviste siempre a mi lado, además pienso que Piedad es una mujer altruista, estoy seguro que le gustará colaborar con la causa, parece respetar mucho a los soles y sus designios, recuerda la pasión con la que habló del sacrificio del buen Havyd, estoy convencido de que luchará por conservar a Ebyam libre del mal, nos ayudara a salvar a la humanidad, confiemos en su criterio, y ahora vamos a descansar mañana tenemos que iniciar el entrenamiento el tiempo es muy valioso no debemos desperdiciarlo.

En su habitación Piedad meditaba sobre los sucedido, nunca hubiese imaginado todos lo acontecimientos que le estaban rodeando, empezó a recapitular los últimos sucesos, iniciando con como su vida fue salvada por un mago poderoso y desconocido, sin ni siquiera haber pedido tan enorme sacrificio, y ahora estaba teniendo el inmenso privilegio de entablar amistad con los paladines de los soles, los elegidos para salvar a la humanidad, los soles estaban actuando, le estaban preparando algo para su destino, así que decidió pedir sabiduría a sus padres para poder comprender y acatar su voluntad, deseaba cumplir el destino que le tuviesen preparado, pues el sacrificio de Havyd no lo rechazaría, honraría su muerte cumpliendo todo lo que los soles le tuviesen preparado, con estos pensamientos rondándole la mente Piedad cerro los ojos y se dispuso a dormir, cumpliría con las expectativas de los soles.